¿Es Chucky un ícono queer?

Sí, sé que este es un blog de música pop pero... es octubre y este es el único lugar en donde puedo explayarme fuera de los hilos de Twitter. Dicho esto, Chucky El Muñeco Diabólico no es ni cerca un ícono gay directamente pero los personajes que giran a su alrededor son bastante LGBTIQ+. 


Charles Lee Ray aka Chucky y su universo entero fueron creados por Don Mancini, guionista y director abiertamente gay, en 1988. De todas las franquicias de horror de los 80s es la única que se ha mantenido vigente ya que ha sabido adaptar su tono a las expectativas de la época. 

Este muñeco de plástico es la perfecta analogía de cómo un producto es capaz de reinventarse para seguir gustando a su audiencia. Recientemente vi las 7 películas que existen hasta el momento y debo decir que hay más trasfondo queer de lo que imaginaba. 

Child's Play


Como el propio Manici menciona, la idea de crear esta historia nace de su propia experiencia siendo un niño gay, acostumbrado a no tener amigos, ser bulleado en la escuela y eventualmente tener que refugiarse en su imaginación para sobrevivir. Andy Barclay, el protagonista infantil de la primera película ya es un poco grande para jugar con esta clase de muñecos, pero aún así le toma cariño y adopta a el Estrangulador de Lake Shore como su mejor amigo.

Andy es la representación de un niño frágil y tímido mientras que Chucky es la representación viva de la masculinidad tóxica. Es grosero, misógino, sexista, psicópata y trata de reafirmar que es un hombre a pesar de estar atrapado en el cuerpo de un muñeco andrógino. 

Child's Play 3


En la tercera película del muñeco pelirrojo, Andy entra a la escuela militarizada tras miles de sospechosos asesinatos en su pasado. Chucky enfurece por primera vez cuando compañeras de Andy le pintan los labios: "¡Esto es guerra!" grita asqueado porque su masculinidad se ve transgredida. 

A la par, Andy y su interés amoroso (De Silva) comparten una dinámica bastante peculiar que desafía las normas de género establecidas para los protagonistas de su época. Andy es suave, delicado y odia la violencia, mientras que De Silva es fría, dura y enseña a Andy cómo usar el rifle. 😏


La película juega todo el tiempo con los roles de género y plantea lo difícil que es sobrevivir en un mundo dominado por machos hambrientos de violencia, y aunque Andy no es un personaje gay, parece experimentar la vida como si lo fuera. 

Bride of Chucky


Esta película es la primera que alejó a los fans de la franquicia porque comenzaba a virar hacia el humor negro herencia de la era post-Scream que se tomaba menos en serio el género. La premisa de Bride of Chucky viene de películas como La novia de Frankenstein y Bonnie and Clyde y cuenta con bastantes referencias al mundo queer

En primera instancia tenemos a Jennifer Tilly (la novia) que ya era un ícono de la comunidad gay para ese entonces por haber protagonizado el filme lésbico Bound (1996), además cuenta con la participación de Alexis Arquette, actriz y activista trans. Pienso que existen detalles que aunque sean pequeños nos muestran el mundo al que Mancini quería acercarnos, por ejemplo la escena donde Chucky y Tiffany asesinan a un policía con clavos y terminan haciéndolo lucir como Hellraiser (1987), película de contenido sexual del escritor y director gay Clive Barker.


No obstante, encuentro algo heteronormado el tema de la película ya que explora la falta de compromiso de las parejas para contraer matrimonio y bla bla... Lo curioso es que vemos a un personaje explícitamente gay: David, quien cuenta que tuvo una relación con un chico pero no funcionó ya que sus padres los descubrieron. Es muy comprensivo con su mejor amiga (con quien finge tener una relación) y le aconseja luchar por su novio a pesar de no tener la aprobación de su padre. Eventualmente es atropellado por un tráiler. #Representación 


Seed of Chucky


No hay duda de que esta es la peor película de Chucky hasta la fecha, sin embargo, yo no creo que sea especialmente mala. El hecho de contar con la participación de John Waters ya nos está advirtiendo que CHUCKY ahora es CAMP. 

Dirigida por Mancini directamente y rodada en Romania, Seed es un homenaje (?) a las películas de horror de bajo presupuesto y un ejercicio absurdo para criticar la vida de los famosos de Hollywood, tanto así, que cuenta con una escena en donde asesinan a Britney Spears y escuchamos a Chucky decir: Oops I did it again... 

El mensaje de esta película está tan diluido que apenas es comprensible y comenzamos a caer en terrenos pantanosos en donde una persona cis escribe sobre situaciones con las que tal vez empatiza pero no entiende del todo. 


La premisa trata sobre cómo Glen o Glenda (hijx de Chucky y Tiffany) no tiene clara su propia identidad. Eventualmente, en el climax de la película, decide que se siente como Glen y Glenda a la vez, lo que quiere decir que es género fluido. Sorprendentemente la situación es tomada de manera natural: su madre actúa comprensiva y Chucky descubre a la par que a él también le gusta ser un juguete y ama el cuerpo que habita. Lo que hace problemática esta conclusión es que —a manera de solución— el alma de Glen/Glenda es transferida a los cuerpos de un niño y una niña de carne y hueso gracias a la magia vudú. 

Probablemente esta conclusión refleja lo distinta que era la sensibilidad respecto al tema en comparación a hoy en día. No estoy justificando ni insinuando que esta es una representación correcta de nadie, solo lo planteo como otro ejemplo de lo adelantada a su época que estaba esta franquicia porque me parece que tener el primer personaje de género fluido en una película de terror es bastante icónico si me lo preguntan. 


Como dato curioso, el nombre de Glen/Glenda está inspirado en una película de 1953 sobre transexualidad, llamada Glen o Glenda, una película pseudoeducativa que sigue las historias de un hombre que gusta de vestirse de mujer, llamado Glen, y de una mujer trans, llamada Anne, por lo que no es descabellado leer todo este trasfondo en las obras de Mancini. 

Cult of Chucky

Saltamos a la última de las películas de Chucky, previa a la serie que está muy próxima a estrenarse. Cult of Chucky merece más crédito del que tuvo porque en realidad es una master class de cómo hacer que tus películas tengan continuidad de manera natural. 

La historia gira en torno a Nica, quien es internada en un hospital psiquiátrico por haber sido falsamente acusada del asesinato de toda su familia.

Este filme tal vez no sea tan gay como Seed, sin embargo, cuenta con un personaje abiertamente gay llamado Carlos, quien revela de manera casual que se acaba de comprometer con su novio y se comenta que tiene una plotline que fue recortada de la película por cuestiones de tiempo. 



Pero el mayor momento queer de la película lo protagoniza Nica, al besarse con Jennifer Tilly/Tiffany al final. En el contexto de la historia, se besan porque Nica es ahora un cuerpo que Chucky habita gracias a la magia vudú. Aunque hay que admitir que, fuera de contexto, parece solo una excusa poco convincente para hacer que las dos protagonistas se besen... Tal vez solo sea eso. 


Así que ahora en el canon, Chucky es literalmente un hombre en un cuerpo de mujer. Y si fingimos por un momento que esa terminología no es horriblemente anticuada e inexacta, crea una nueva versión del personaje que está inherentemente fuera de la norma "cisgénero" y refleja un arco abismal con el Chucky misógino que solo quería poseer cuerpos de chicos adolescentes de las primeras películas; auguro que veremos esta dinamica representada en la próxima serie.

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Creo que para cerrar la pregunta de este artículo, tal vez sí, Chucky es un ícono gay por ocurrir en un universo progresista. Pensemos en que el concepto en sí de "un hombre atrapado en un cuerpo del que necesita salir" resuena bastante con nuestras experiencias. 

En estas películas, los gays no se limitan solo a cierto tipo de personaje. Los gays son los asesinos, son las víctimas, son los héroes. La normalización sin martirio o idolatría es rara de ver, pero creo que Mancini lo ha conseguido a lo largo de estos 30 años.

¿Existen otras películas de terror que quizás encajen más y mejor en la categoría Queer y que cuenten con personajes con una mejor representación al respecto? Sin duda. Pero creo que Child's Play ha sido injustamente ignorada en este sentido durante mucho tiempo y merece reconocimiento.

El cine de terror todavía cuenta con demasiados prejuicios, uno de ellos, que me parece especialmente insultante, es la noción de que el terror es un género masculino y que sus fans son en su mayoría hombres heterosexuales. La representación de las mujeres y de la comunidad LGBTIQ+ en el cine de terror no siempre ha sido positiva, pero eso no significa que los fans que pertenecen a esas comunidades no hayan encontrado refugio en las películas de terror.

Don Mancini es un creador y amante del terror gay que incluye intencionadamente a su comunidad, su mundo y sus referencias particulares en su obra y por eso siento amor y conexión cuando veo sus películas, y tal vez por eso resuenan conmigo desde que era un niño. 

 

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